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Olgierd von Everec era el hijo mayor de Kristina y Bohumil von Everec, el hermano de Vlodimir, y el esposo de Iris.

En algún momento fue un oficial redaniano y más tarde el atamán de la Compañía Libre Redaniana. Sin embargo, a diferencia de sus compañeros, era educado, respetaba el código noble y amaba el arte.

Entrada del diario[]

TW3 Diario Olgierd
A día de hoy, aún no sé lo que condujo a Geralt a leer el anuncio publicado por Olgierd von Everec. ¿La célebre curiosidad del brujo? ¿Una bolsa de monedas alarmantemente ligera? O tal vez alguna fuerza perversa... Sea como fuera, Geralt decidió hacer una visita al noble, que gozaba de una triste fama en la región, y andar detrás del botín del monstruo de las cloacas.
Desde el momento en que lo conoció, Geralt supo que Olgierd era un personaje único. Lideraba una banda de malhechores que besaban el suelo que pisaba, aunque era evidente que él no era de la misma calaña: era una persona culta, amante del arte y defensora de un cierto código caballeresco. Sin embargo, Geralt percibió algo indefinible en aquel hombre, algo que años después calificaría como "un vacío que pedía a gritos que lo llenaran".
Más tarde, Geralt volvió a la finca donde conoció a Olgierd y a su banda por primera vez, y encontró el lugar en llamas. Pronto descubrió que dicha propiedad en realidad no pertenecía a Olgierd, sino que simplemente el atamán y sus hombres se habían adueñado de ella y, finalmente, la diversión se les había ido de las manos. A Olgierd no le importó la exuberancia pirotécnica de sus hombres, pero consideró una crueldad excesiva el asesinato del señor de la mansión y ordenó la decapitación del responsable. Geralt apareció en escena en mitad de esta ejecución. En el tumulto que sobrevino, realizó un descubrimiento sorprendente: Olgierd von Everec era inmortal.
Y la inmortalidad fue solo la primera de una serie de inesperadas revelaciones acerca de Olgierd. El Señor Espejo desveló que ambos habían firmado un contrato: a cambio de restaurar su fortuna y posición, Olgierd le había prometido a Espejo algo muy personal (Geralt aún no sabía qué exactamente). El contrato incluía una extraña cláusula: antes de considerar el acuerdo completado y que el Señor Espejo pudiera reclamar su deuda, tenía que satisfacer tres deseos de Olgierd. Sin embargo, no podía hacerlo personalmente, sino que necesitaba que lo hiciera un representante. ¿A quién eligió para este cometido? A Geralt, que de este modo se veía arrastrado hacia un acuerdo personal entre un poderoso inmortal noble y el misterioso Gaunter O'Dimm.
Al saber que Geralt sería el encargado de llevar sus peticiones, Olgierd no perdió el tiempo y le lanzó los dos primeros desafíos: traerle la casa de Maximilian Borsodi y conseguir que su hermano Vlodimir se divirtiera como nunca...
Cumplir los deseos de Olgierd había resultado complicado pero provechoso, pues Geralt ahora sabía mucho más acerca del extraño noble y la historia que había detrás podría hacer que hasta un cíclope derramara lágrimas.
Hace mucho tiempo, Olgierd se enamoró perdidamente de Iris, una hermosa doncella de una familia adinerada. Sus padres aceptaron su propuesta de matrimonio y todo parecía destinado a un final feliz cuando una vorágine de infortunios se cernió sobre la familia Von Everec. Un cúmulo de malas decisiones y varios años de malas cosechas habían endeudado gravemente a la familia. Después, los Borsodi compraron sus deudas y, con su dura aplicación de los términos, llevaron a los Von Everec a la bancarrota. A la luz de estos acontecimientos, los padres de Iris cambiaron de opinión acerca del futuro marido de su hija, anularon el compromiso con Olgierd y concedieron la mano de Iris a un príncipe ofiri que había venido a estudiar a Oxenfurt. Presa de la desesperación, Olgierd acudió al Señor Espejo y pronto recuperó su fortuna, su influencia y, lo que era más importante, a su prometida. Todo parecía marchar bien hasta que descubrió que sus deseos tenían un efecto secundario no deseado. Poco a poco, su corazón se estaba convirtiendo en piedra.
Ahora el brujo estaba a un tris de concluir el pacto entre Olgierd y el Señor Espejo. ¿Significaba eso que todo volvería a ser como antes? Geralt no estaba seguro. Pero una pregunta no paraba de acecharle: ¿qué era ese "algo muy personal" que Gaunter O'Dimm pretendía conseguir de Olgierd?.
Si Geralt investigó pero dejó morir a Olgierd
Geralt no tuvo que esperar mucho para saber lo que subyacía en el contrato entre Olgierd von Everec y Gaunter O'Dimm. A cambio de recuperar la fortuna familiar, limpiar su nombre y casarse con Iris, Olgierd había aceptado entregar su alma al Señor Espejo. Geralt sabía cómo detenerlo, pero por alguna razón no hizo nada y en su lugar se limitó a observar cómo O'Dimm reclamaba su deuda. De este modo terminó la triste historia de Olgierd von Everec, un hombre que vivió como si no hubiera mañana, se divirtió como si nunca hubiera conocido la alegría y disfrutó de un amor tan apasionado que estuvo dispuesto a entregar su alma por él.
Si Geralt salvó a Olgierd
Cuando Geralt tuvo conocimiento de que el Señor Espejo jugaba por la más alta de las apuestas, el alma de Olgierd von Everec, decidió no quedarse mirando. En su lugar, halló el modo de engañar al ser demoníaco y recuperar el alma de Olgierd. Este, una vez liberado de su pacto y con el corazón restañado, dio las gracias a Geralt y le regaló su espada, un recuerdo que había permanecido en su familia durante generaciones, para luego marcharse y perderse en el horizonte.

Misiones asociadas[]

  • Las primeras víctimas del mal
  • ¡Ábrete, sésamo!
  • La fiesta del hombre muerto
  • Escenas de matrimonio
  • Quien siembra vientos...

Curiosidades[]

Galería[]

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