El monstruo de Tufo es un poderoso shaelmaar que aparece en la expansión Blood and Wine.
Entrada del bestiario[]
- Un caballero andante podría lograr matar a un ghul y un campesino con una jauría de perros podría derribar a un oso, pero dejemos clara una cosa: ni la mejor armadura de acero jamás forjada ni la clavícula del mismísimo san Plegmundo podrían darle a mortal alguno la más mínima posibilidad de sobrevivir contra las criaturas que moran en las profundidades de la tierra.
- un veterano de la Guardia Ducal de Toussaint durante la instrucción de nuevos reclutas
- Imagina una criatura que mata humanos, se alimenta de huevos de kikimora y cava túneles subterráneos por los que cabría el carruaje de la coronación del emperador de Nilfgaard tirado por seis caballos. Ahora imagina que cava con tal fuerza que hace temblar la tierra y acaba por derribar las casas de la superficie. Al notar estos síntomas, Geralt no estaba seguro de a qué clase de bestia se enfrentaría, pero sí lo extremadamente precavido que debía ser.
- Tras examinar el rastro del monstruo, dilucidó que tenía que tratarse de una vieja hembra de shaelmaar.
- El monstruo que arrasaba Tufo resultó ser una vieja matriarca shaelmaar. Geralt la persiguió y luchó contra ella en las profundidades.
- Aunque compartía ceguera con todos los de su especie, esta criatura era capaz de maniobrar según las vibraciones y los ruidos. Mientras Geralt permaneciera inmóvil y en silencio, estaría a salvo, si daba un paso o respiraba algo más fuerte, la matriarca se lanzaría hacia su posición a gran velocidad.
- Geralt las pasó canutas para derribar a este monstruo, pues no conseguía perforar su coraza con ningún arma. Finalmente, logró vencerle y el monstruo de Tufo ya es historia.
Misiones asociadas[]
- Contrato: El monstruo de Tufo